¿Es aburrido comer saludable?

Por supuesto que no.

Y el que diga lo contrario es porque no sabe comer.

Hay quien piensa que una dieta saludable es sinónimo de comer alimentos crudos, sosos y como resultado, llevar una dieta aburrida.

De eso nada.

Si me dices hace 100 años, vale. 

No había tantos recursos ni tantos alimentos disponibles a nuestro alcance.

Pero hoy en día, con un poco de cotilleo por Google y ganas de cocinar, puedes conquistar el estómago de quien quieras y llevar una dieta sana.

Y ahora te planteo otra excusa que utilizan muchas personas.

¿Piensas que comer saludable es complicado?

Si no te apetece cocinar, sí.

Y si comes siempre lo mismo, también.

Todos conocemos la rueda de alimentos y la famosa pirámide que aprendimos en el colegio.

Aunque tenemos claro que todo está cambiando.

Y si añadimos el jaleo de que hay que combinar proteínas, con grasas sin excesos, tomar hidratos de carbono, también sales minerales y por supuesto, frutas y verduras.

¡Madre mía!

Entonces te echas las manos a la cabeza y te preguntas:

¿Pero en qué momento voy a tomar las dosis de proteínas recomendadas?

¿Qué alimentos tienen calcio?

¿Cómo quieren que tome tantas piezas de fruta al día?

Vaya… 

Parece que sí va a ser complicado esto de comer saludable…

Vale, no te preocupes. Te voy a echar una mano.

Hay cosas que son más fáciles cuando te las explican.

Voy a ello.

Los 5 principales errores que posiblemente estás cometiendo en tu dieta y no te has dado cuenta

1. Para llevar una dieta saludable, tienes que tener hábitos saludables

De nada sirve que comas cinco piezas de fruta al día si luego te encanta el “sofing” y practicas mucho el sedentarismo. 

¡Observa tu estilo de vida y cuidalo!

2. Ojo con eliminar grupos de alimentos

Hoy en día podemos encontrar muchísimos tipos de dieta.

Me refiero a la cetogénica, vegana, vegetariana, paleolítica y no sé cuántas más.

No voy a meterme en si son correctas o no. La verdad es que hay estudios científicos de casi todos.

Pero sí te recomiendo que, si sigues alguna, procures hacerlo bien.

Es decir: te documentes y cumplas con las recomendaciones que indican los expertos para no sufrir carencias.

3. Comprar comida preparada/congelada/envasada

¿Qué es eso de comprar patatas fritas congeladas en el supermercado? ¿Es para cocinar más rápido? 

No sé tú, pero a mí me gusta comprar la fruta en una frutería y no en un envase. 

Además que así consumo un producto acorde a mis valores y ayudo a mis vecinos a los negocios locales.

Te aconsejo hacer lo mismo. :)

4. Comer lo mismo que esa persona que le funcionó tal dieta, para que te funcione a ti

¿Todavía no sabes que cada persona tiene un metabolismo diferente y absorbe los alimentos a su ritmo? 

Céntrate en ti y en lo que comes, no en el plato de al lado.

 5. No tener en cuenta el azúcar oculto

Por si no lo sabías, lo contienen los alimentos industriales, los productos elaborados, los envasados y algunas verduras en lata. 

Sí sí, ya lo sé.

Te ha quedado claro que comer saludable no es complicado ni aburrido. 

Lo que aburre es no tener ideas nuevas para cocinar y la incomodidad de tener que pensar qué comer cada día.

Eso sí que cansa.

Pero te diré una cosa:

Yo no puedo hacer la comida por ti. Ojalá. 

Pero lo que sí que puedo hacer por ti es dejarte algunas recetas saludables para tu dieta equilibrada y, lo mejor, que son compatibles con Malferida.

Por supuesto. :)

Para que dejes a los tuyos con la boca abierta y el estómago lleno.

¡Toma nota!

Aquí están: 4 sugerencias para los menús diarios

1. Comenzamos por el picnic

¿Qué llevar para que sea del gusto de todos? Pues un poco de todo ?

  • Perlas de espinaca: consiste en hacer unas bolitas creadas con huevo, queso, mantequilla derretida, cebolla y espinacas. 

Para chuparse los dedos y la mano entera.

  • Tortilla de patatas: The original. Huevos, patatas, cebolla para quien le guste y un buen aceite. Nunca falla.

Fácil, sencillo y para todos los públicos. Así nadie se queja.

  • Quesadillas: tortita de maíz, rellena de queso y de lo que más te guste. Hazlas variadas y sorprende a tus comensales. 

¿Qué llevará esta?

  • Saladitos variados: Hojaldres cortados en trozos pequeños envueltos en lo que tu imaginación te deje hacer en tu cocina. 

Crea y prueba. ¿Por qué no?

2. Almuerzos en el trabajo

Entre tú y yo. 

Cuando tomamos un buen almuerzo, esta es la mejor hora para tomar un refresco saludable como Malferida. ¿O me equivoco?

  • Tostada de jamón con queso. Sí señor. Empecemos bien el día. Imagínate una Malferida con tu tostada o bocadillo a media mañana. 
  • Sandwich semi vegetal. Lechuga, tomate, huevo, atún y mayonesa. ¡Rico rico! Esto da buen humor para todo el día.
  • Panes de queso azul. Se necesita masa de pan cruza mezclada con queso azul y especias. Si tienes tiempo de cocinar, esta es una buena opción de almuerzo casero.

3. Meriendas ligeras

  • Chips de fruta desecada. Elige frutas que te gusten como plátano, manzana o fresas. 

Córtalas a rodajas finas y mételas en el horno a temperatura baja durante una hora. 

Puedes ponerle limón para que no se oxigenen y echarles alguna especie que te guste.

  • Macedonia de frutas. Para que tomes una buena dosis de vitaminas variadas en un solo plato.
  • Batidos verdes. Nadie dijo que las verduras solo se podían tomar hervidas o crudas. ¿Por qué no probarlas en batido? 

Además, prueba a combinar las hortalizas que quieras y me cuentas. 

Luego no me digas que comer saludable es aburrido, jeje.

4. Cenas saludables

  • Ensalada de pimientos. Corta varios pimientos de colores en tiras, cuécelos a fuego lento en una sartén y luego mételos al horno con vino blanco.

 Déjalos enfriar y ya tienes una tapa para varios días. 

¡Exquisito!

  • Rollitos de pan de arroz. Rellenalos de lo que más te guste y enrollalo muy compacto para que no se abra. 

Puedes acompañarlo de tu salsa favorita.

  • Pizza de coliflor. Con esta idea ya no hay excusas para no tomarla. Conviértela en pizza y te la quitarán de las manos. 

Puedes cortarla en trocitos pequeños y mezclarla con huevo, ajo, orégano y mozzarella.  

Aplasta esa masa como base de pizza y decórala como más te guste. 

***

¿Qué te parecen mis recomendaciones?

No sé a ti, pero a mi me ha dado hambre.

Voy a abrirme una Malferida, jeje.

Y tú si no tienes ninguna fría, te cuento el truco del almendruco para enfriar bebidas.

Enfría la tuya, ábrela y sigue leyendo.

Que también quiero sugerirte algunas recetas veganas.

Y de las buenas.

Por si te apetece seguir experimentando.

Eliminando mitos: ¿comer vegano es aburrido?

Claro que no. 

Y el que lo piense es porque no se ha informado.

Te diré algo.

Ni comer vegano ni los veganos son aburridos. Hay muchos alimentos que ya de por sí solos son veganos y están riquísimos.

Con ellos y un poco de imaginación, se pueden hacer platos deliciosos.

Te lo aseguro.

Pero rara vez nos paramos a pensarlo.

Y para demostrártelo, te voy a recomendar dos recetas veganas que nunca hubieras imaginado.

2 recetas veganas que si te las da tu amigo, no te enteras que son veganas ;)

Voy a empezar por algo que no vas a poder evitar probar:

Gofres de chocolate totalmente veganos

Toma ya.

Aquí tienes la receta.

Ingredientes con las medidas que te recomiendo:

  • 240 gr de harina integral
  • 50 gr de azúcar moreno
  • 1 cucharada de levadura
  • 300 ml de leche vegetal
  • 50 ml de leche de coco
  • 2 huevos de lino (sustitutos de huevo para la cocina vegana)
  • Extracto de vainilla

Coge la batidora y dale caña a todos los ingredientes.

Una vez mezclados, vierte todo en la gofrera y a esperar.

¡Ya tienes una buenísima idea para merendar!

Y para los amantes del chocolate, toma nota del sirope:

  • 1 cucharadita de cacao en polvo sin azúcar
  • 2 cucharaditas de stevia.
  • Un chorrito de agua.

Mezclalo todo y al microondas.

¡Ya tienes tu gofre de chocolate vegano!

Ahora saca el frigo esa Malferida y a merendar.

Voy con la segunda receta.

Tortilla de patatas vegana, sin huevo

¿Cómo?

Pues creando una mezcla de ingredientes vegetales simulando el huevo.

Así de fácil.

Veamos…

Vamos a necesitar, por ejemplo:

  • 400 gr de patatas
  • Media cebolla dulce
  • 1 calabacín pequeño

Corta y fríe todo al gusto y escúrrelo para juntarlo con el resto de ingredientes.

Para hacer la mezcla líquida sin huevo:

  • 70 gr de harina de garbanzos
  • 180 ml de agua
  • 90 ml de leche de soja
  • Aceite y sal

Lo mezclamos todo en un bol con la batidora, hasta que esté homogéneo.

Y añadimos los demás ingredientes.

¡Hala!

Ya tienes todo preparado para hacer tu tortilla de patatas vegana.

No olvides llevar tu Malferida si vas fuera de casa.

Pilla aquí tu preferida.

¡Salud!

Y ahora te toca a ti. 

¿Podrías recomendarme alguno de tus platos estrella para combinarlo con Malferida?

Te leemos en comentarios ⬇️⬇️⬇️